viernes, 1 de noviembre de 2013

Amigos de la calle y nosotros, algo en común.

Tengo tantas cosas que decir, que no se si como, ni por donde empezar. Experiencia como la de hoy nunca la he tenido, y a pesar del mal trago que he pasado, sera una experiencia que marque mi vida y que la ha enriquecido considerablemente.

Cuando tratas con personas de la calle ves la dureza de la vida, el como día a día deben luchar y sacarse ellos mismos a delante. Y si es cierto, que yo no tengo falta de nada, llego a casa y tengo una familia que me acoge, me quiere y se preocupa por mi. Si abro la nevera tengo mas o menos comida, según el día de la semana que estemos y cuando toque hacer la compra, pero siempre tendré algo que comer. Si busco en mi armario, encuentro ropa y mas ropa, alguna de fiesta, de deporte, que me pongo a menudo o que puedo estar tres meses sin ponerme. Si tengo sueño, tengo una bonita cama con un nórdico esperándome para que descanse. Al levantarme abro un grifo y puedo lavarme, asearme o darme una ducha bien calentita.
Todas estas cosas y muchas mas, parecen que deben estar obligatoriamente en  nuestra vida, que si falta alguna de estas es que algo va mal.
Pues bien, hay gente que tiene que vivir día a día sin nada de esto. Buscando en cada momento algo que llevarse a la boca y saciar ese hambre de estar todo el día sin comer. Encerrados en si mismo y viendo a todos como enemigos o personas que van a hacerle daño. Con miedo a lo que pasará al dia siguiente, y si no es miedo, si mucha incertidumbre. Tantos obstáculo que socialmente tienen que superar, el que te señalen con el dedo o que simplemente les miren como personas diferentes, que merecen un trato distinto o que mejor no tratar. 

Pues NO. Es cierto que ellos no tienen todas esas comodidades que nosotros, gracias a nuestras familias, tenemos y disfrutamos, pero tiene cosas mucho mas valiosas. Saben lo que es luchar con todas sus fuerzas, lo que es superarse día a día a pesar de todos los obstáculos que se encuentran en el camino. Saben lo que es agradecer el mínimo detalle y hacer de ello algo especial. 
Pero si hay algo que compartimos todos. los ricos y pobres, los que mas tienen y los que menos, los que viven cómodamente, los que viven apurados y los que viven en la calle es que todos nos sentimos movidos por algo mas fuerte que nosotros, algo que si nos falta, todo lo demás pierde su sentido, pero que si lo tenemos, ya sea hacia un amigo, tu pareja, tus hijos, algún familiar... somos capaces de luchar contra viento y marea, enfrentarnos a cualquier situación, sí, hablo del AMOR.