JMJ

 Dos millones de jovenes, siete dias, una 

ilusion y un sueño cumplido. JMJ.

Trabajo duro. Unos dias duros como los que mas. Dias que parecian que no iban a terminar. Dias que deseabas que acabaran lo mas rapido posible pero que luego en el momento menos inesperado sucedia cualquier cosa que te hacia valorar ese trabajo tan duro. Uno de eso grandes momentos fue cantar San Jose de Calasanz con 1600 personas de diferentes partes del mundo. Se me pusieron los pelos de punta de lo espectacular que fue.

Mucha gente. Alli donde fueras habia miles y miles de personas a tu lado. Era imposible sentirse sola en algun momento. Giraras la cabeza a un lado o a otro encontrabas una palabra de amistad, una sonrisa preciosa o una simple mirada de complicidad. En mi vida habia visto tanta gente que sintiera lo mismo que yo, que compartieran mi fe, que no me hicieran sentirme un bicho raro por creer en Dios. Gente, gente y mas gente que si necesitabas cualquier cosas te la daban, que aunque no te conocieran de nada se ponian a gritar contigo como amigos.

Y despues de esos dos millones de personas que pasaban por tu alrededor yo me quedo especialmente con el grupo de Aluche. Ese grupo de españoles y filipinos que al principio actuabamos como dos grupos distintos, separados que no teniamos que ver el uno con el otro y que al finalizar la JMJ hemos terminado siendo un solo grupo, un grupo que se ha intentado ayudar lo maximo posible, un grupo que se ha unido mucho mas de lo esperado y con el que tengo la certeza que podre contar siempre.

Y una palabra que no debe faltar en esta entrada es la palabra... 

GRACIAS